Alguna vez te has puesto a pensar: ¿Por qué algunas personas guardan objetos inútiles en sus closets o en un cajón viejo (zapatos, muebles, piedras, madera, tornillos, clavos, ropa, centavos, etc.)? Bueno, creo que es porque piensan o creen que algún día, no saben cuándo, los podrán utilizar… Hay otro tipo de personas que les gusta cuidar el dinero (lo guardan a toda costa) y se enojan cuando tiene que pagar cuentas o simplemente gastarlo… ¿Conoces personas así?
Entonces déjame contarte que yo, alguna vez tuve ese tipo de pensamiento de escasez, y en casi todas las ocasiones, más de un 95% para ser exacto, me equivoqué guardando cosas inútiles, ya que todos esos “cachivaches” lo único que han ocasionado en mi vida es «Más escasez».
Muchas personas me preguntan: — Mike ¿Acaso existe la “Anti-Abundancia”? —, permíteme explicártelo de una manera sencilla, cuando hablo de la anti-abundancia me refiero al conjunto de situaciones, emociones, sentimientos, creencias personales y hábitos añejos que lo único que ocasionan es que te quedes varado en el pasado sin poder avanzar porque te aferras a algo o a alguien y ese peso hace que vayas muy lentamente.
Leyendo el libro más antiguo de la historia, pude asimilar una parábola en la que se hace referencia a los talentos — dejo la cita para quienes quieran leerlo Mt. 25, 14-30 — en la misma se nos instruye a no guardar o esconder aquellas cosas que se nos han dado, porque aún lo poco que tenemos sino lo utilizamos se nos quitará. Trasladando esta cita a un plano emocional, entiendo que quiere decir que no debemos guardar sentimientos, recuerdos y emociones, porque éstos lo único que hacen es recordarnos un pasado remoto e invertimos nuestras energías para volver a vivirlo, en cambio, en la misma parábola se no pide que dupliquemos nuestros talentos para que con ellos logremos todo lo que es importante para nuestra vida.
Y por eso es preciso crear un espacio, un vacío, para que las cosas nuevas lleguen a tu vida, debes eliminar o soltar todo aquello que es inútil en tu presente, tanto lo que has guardado en tu mente, así como también lo que hay guardado a tu alrededor (cajones, closet, cuartos, garaje, oficina, etc.), para que la abundancia comience a llegar a tu vida. Es la fuerza de este vacío que absorberá y atraerá todo lo que deseas. Mientras estés cargado material o emocionalmente con esas cosas viejas e inútiles, no habrá un espacio para nuevas oportunidades y las posibilidades no se materializarán.
Los bienes materiales y espirituales precisan circular, así como el aire necesita entrar a los pulmones para purificarlos. Por lo tanto limpia todos los cajones, los armarios, tu cuarto. Regala todo aquello que no usas más, ¡Claro!, regala todo aquello que sea útil para otros y no regales algo que ya no sirva… La actitud de guardar un montón de cosas inútiles amarra tu vida, lo mismo que no perdonar a los que te han hecho daños ata a tu espíritu… Mientras haces limpieza de cosas materiales, haz también una limpieza mental, y suelta resentimientos, rencores, perdonate por las veces que te has fallado al no crear la vida que anhelas. Sabes, no son los objetos guardados los que estancan tu vida, sino el significado que tienen estos objetos para tu vida.
Cuando guardas muchas cosas inservibles, ya sea en un espacio físico o en tu corazón, le dices a tu cerebro que existe la posibilidad de que en algún momento haya carencia, limitaciones o escasez, y tu cerebro que es tu aliado llega a comprender que es muy posible que: «Mañana es seguro que faltará algo», y que no tendrás medios de proveer tus necesidades. Con esa postura, estás enviando dos mensajes importantes para tu vida:
- Tú no confías en el mañana;
- Crees que lo «Nuevo y lo mejor” No son para ti, ya que te alegras con guardar cosas viejas e inútiles.
Deshazte de lo que perdió el color y el brillo y deja entrar lo nuevo en tu vida y en tu casa, pero inicia ahora mismo, ¡La sabiduría que buscas está en tu interior!
Te mando un abrazo.
¡Gracias por leerme!
¡Piensa, actúa y vive con pasión!
