El silencio suele ser nuestro compañero
En el incesante baile de la vida, a menudo nos encontramos atrapados en una coreografía de desprecios, desplantes, humillaciones, y relaciones tóxicas que nos llevan a cuestionarnos en silencio y muchas veces a llevar ese silencio a todas partes a donde vamos, pero creemos que no merecemos o no necesitamos hablarlo con nadie.
Este silencio, a menudo tan pesado como un mundo invisible, se convierte en nuestro compañero constante. Lo llevamos a todas partes, como una sombra que se adhiere a nuestra existencia, porque internamente pensamos que es mejor no molestar a nadie o que nadie nos ofrece ayuda porque no les importamos como las personas suelen importarnos a nosotros. Nos resignamos a esta coreografía de sufrimiento, como si fuera nuestro destino ineludible. Pero, entretejido en ese silencio, hay una verdad inmutable: dentro del conflicto está la solución, y es que todos tenemos poderes personales que son intransferibles a menos que tu los quieras regalar, dichos tesoros ocultos que, por descuido, regalamos sin cesar. La aceptación de esta realidad es el primer paso hacia una transformación poderosa.
¿Cuánto más vas a soportar?
¿Cuántos desprecios más necesitas para despertar? ¿Cuántos desplantes más? ¿Cuántas humillaciones más en tu trabajo? ¿Cuántas relaciones tóxicas o fallidas más? ¿Cuántas mentiras más te vas a contar antes de comenzar? ¿Cuántas desilusiones más? ¿Cuántos momentos más de silencio llevarás contigo antes de decidir romper la danza y reclamar lo que es tuyo? ¿Cuánto más será suficiente?…
Las preguntas suelen actuar como destellos de luz en la penumbra de las experiencias negativas que, a menudo, ignoramos. Como si se tratara de un juego, inadvertidamente regalamos nuestros poderes personales, dejándolos caer como piezas de ajedrez en manos ajenas.
Demasiado a menudo, las personas se encuentran atrapadas en un ciclo interminable de maltrato y desilusiones, ya sea en relaciones personales o en el ámbito laboral. A medida que las personas aceptan este tipo de situaciones, van disminuyendo su autoestima y su confianza en ellos mismos. Así se convierten en espectadores pasivos de sus propias vidas, permitiendo que otros definan su valor y su felicidad. Sin embargo, es vital comprender que sólo nosotros tenemos el poder de cambiar esta dinámica.
Hay personas que despiertan rápidamente ante las situaciones que ponen en amenaza su integridad; así comienza el proceso de dejar de diluir nuestra esencia, de renunciar de una vez por todas a dudar de ti mismo y de lo que te hace único. Este post es sólo un recordatorio de que esos desprecios, desplantes y desilusiones no son un destino inevitable, sino señales que claman por la recuperación de tu poder.
Es hora de despertar
Ya es tiempo de reconocer que en muchos aspectos de tu vida, estas regalando tu poder personal. Permites que las circunstancias y las acciones de los demás dicten tu bienestar emocional y mental. Es momento de que tomes el control y dejar de ceder ante factores externos a ti mismo. Mi intención es compartirte tips para que puedas recordar cómo puedes recuperar ese poder personal que has regalado, y que aprendas a vivir una vida más plena y empoderada ¿Estás preparado?
Es imperativo reconocer la necesidad de un cambio en nuestra vida. En tu diario vivir, es fácil caer en la rutina, dejando que las circunstancias nos dirijan en lugar de dirigirlas nosotros. Es hora de despertar a la realidad de que cada día es una oportunidad para ser consciente de nuestras elecciones y tomar las riendas de nuestro destino. Este despertar no sólo implica reconocer la necesidad de cambio, sino también aceptar el desafío emocionante de transformar nuestra perspectiva y acciones. Es el llamado a ser arquitectos activos de nuestras vidas, a tomar decisiones conscientes y a avanzar con determinación hacia la realización de nuestros objetivos. Es hora de despertar a la magnitud de nuestro propio poder y abrazar el cambio con valentía y convicción.
Tus 4 poderes personales
Todo gran Poder viene acompañado de una gran Responsabilidad (Sí, ya sé que es una frase dicha por el tío Ben, en la película de Spiderman 3, pero qué quieren que haga, esa frase aplica perfectamente acá)… Bueno, como te decía, tu poder personal está compuesto por 4 poderes internos intransferibles, dichos poderes son elementos fundamentales que conforman la esencia de nuestra individualidad. Estos poderes, a menudo subestimados o descuidados, son la base de nuestra capacidad para moldear nuestras vidas y relaciones. La reflexión sobre cómo utilizamos estos poderes puede ser reveladora y conducir a una transformación significativa.
El poder de pensar:
- Concepto: Hace referencia a tu capacidad de razonar, analizar, reflexionar y tomar decisiones conscientes. Implica el uso de la mente para procesar información, resolver problemas y formar juicios y contarte aquellas historias que fortalezcan tu autoestima.
- Importancia: Recobrar el poder de pensar te permite tomar el control de tus propias decisiones. Al ser consciente de tus pensamientos, puedes identificar creencias limitantes, cuestionar suposiciones y elegir perspectivas que te conduzcan hacia el crecimiento personal.
- No recobrar dicho poder puede suponer estar escuchando en nuestra cabeza aquellas conversaciones que nos limitan, estar suponiendo lo que otros piensan sobre nosotros, y sobre analizar situaciones a las que no encontramos soluciones.
El poder de sentir
- Concepto: Se relaciona con tu capacidad de experimentar y procesar emociones. Involucra reconocer, comprender y expresar tus sentimientos de manera saludable y respetando los sentimientos de otras personas.
- Importancia: Recobrar el poder de sentir es esencial para una vida equilibrada. Conectar con tus emociones te permite entender tus necesidades internas, fomenta relaciones más auténticas y te proporciona la energía emocional necesaria para enfrentar los desafíos de la vida.
- No recobrar este poder puede suponer que somos fácilmente manipulable por situaciones o personas que buscan el chantaje emocional para lograr sus propios cometidos.
El poder de decir
- Concepto: Se trata de expresar tus propios pensamientos, sentimientos y necesidades de manera clara, auténtica, asertiva y empática. Incluye la habilidad de comunicarte de manera efectiva con las personas con las que interactúas a diario.
- Importancia: Recobrar el poder de decir es fundamental para establecer límites saludables, construir relaciones significativas y evitar la acumulación de resentimientos. La comunicación abierta y honesta fortalece tu autoestima y te ayuda a construir una conexión más profunda con quienes te rodean.
- No recobrarlo supone que muy a menudo te encontrarás diciendo aquellas cosas con las que no estás de acuerdo o aquellas situaciones a las que no le quieres hacer frente, comúnmente sucede que «decimos lo que el otro quiere escuchar para llevar la fiesta en paz» y eso nos lleva a estar en paz con el mundo, pero en guerra con nosotros mismos.
El poder de hacer
- Concepto: Implica tomar acción en función de tus pensamientos, emociones y decisiones. Es la capacidad de traducir tus intenciones en acciones concretas, sin este poder todos los anteriores se vuelven incongruentes y nuestra vida carece de poder personal.
- Importancia: Recobrar el poder de hacer te permite avanzar hacia tus metas y objetivos. La acción es la llave para transformar tus sueños en realidad. Al tomar el control de tus acciones, te conviertes en el arquitecto activo de tu vida, construyendo la vida que deseas y la realización personal.
- No recobrarlo nos volverá incongruentes y muchas veces nos sentiremos que vamos como veletas por la vida, sucumbiendo ante los deseos de otras personas, y seguiremos sintiendo que nuestra vida carece de sentido.
Recobrar estos poderes personales es crucial para vivir una vida mucho más plena y auténtica. Al hacerlo, nos convertimos en los protagonistas de nuestra propia historia, tomando decisiones conscientes, manejando tus emociones de manera saludable, comunicándonos de forma efectiva y llevando a cabo acciones que nos acerquen a nuestros objetivos. Estos poderes son la esencia de nuestra individualidad y la clave para vivir una vida enriquecedora y significativa.
En el ámbito laboral, también es fundamental que tomes medidas para que dejes de regalar tu poder personal. Si estás atrapado en un trabajo que no te satisface o que te somete a tratos injustos, debes buscar alternativas y tener la valentía de cambiar de rumbo. No debes permitir que el miedo te paralice; en cambio, debes recordar que tienes el poder de moldear tu carrera profesional según tus deseos y aspiraciones.
Claves para recuperar tu Poder Personal:
- Aprende a amarte a ti mismo: El primer paso para dejar de regalar tu poder es cultivar un amor incondicional hacia ti mismo. Reconoce tus fortalezas y acepta tus imperfecciones. Cuanto más te valores, menos tolerarás situaciones que te hagan sentir menos de lo que realmente eres.
- Establece límites claros: Aprende a decir «no» cuando sea necesario, de una manera asertiva y empática, y establece límites saludables en tus relaciones y entorno laboral. No tengas miedo de expresar tus necesidades y expectativas de manera asertiva. Debes aprender a establecer límites saludables y saber decir «NO» cuando algo no te beneficia o te lastima. Es esencial que reconozcas tu valía y que entiendas que mereces ser tratado con respeto y amor. Aceptar menos de lo que mereces sólo perpetúa el ciclo de desempoderamiento.
- Encuentra el apoyo adecuado: No tienes que enfrentar esta búsqueda de empoderamiento solo. Busca el apoyo de amigos cercanos, familiares o incluso profesionales como terapeutas o coaches. Compartir tus experiencias y emociones con personas comprensivas puede proporcionarte una perspectiva valiosa y alentadora.
- Conciencia y Reflexión: Tómate el tiempo para reflexionar sobre las situaciones en las que has cedido tus poderes. Identifica patrones recurrentes y reconoce los momentos en los que permitiste que otros influyeran en tus pensamientos, emociones, palabras o acciones. La conciencia es el primer paso para recuperar el control.
- Practica la Autenticidad: Recupera tus poderes siendo auténtico contigo mismo y con los demás. Expresa tus pensamientos y emociones de manera abierta y honesta. Al hacerlo, te empoderas y refuerzas la conexión con tus valores fundamentales. La autenticidad es una poderosa herramienta para recuperar el control sobre tus decisiones y acciones.
Regalar tu poder personal es un hábito tóxico y dañino que puede llevarte a una vida llena de insatisfacción y desesperanza. A través de la autoaceptación, el establecimiento de límites y la búsqueda de apoyo, puedes romper este ciclo y recuperar el control de tu vida. Reconoce tu valía y atrévete a alejarte de lo que no te beneficia. Deja de aceptar menos de lo que mereces y comienza a caminar hacia una vida más empoderada y llena de autenticidad. Recuerda, el poder para transformar tu vida está en tus manos. ¡Es hora de tomarlo!
Así que: ¿Qué estás esperando? ¡Empieza hoy mismo! Porque si no es ahora, entonces ¿Cuándo?
Te mando un abrazo.
¡Gracias por leerme!
¡Piensa, actúa y vive con pasión!